La crisis sanitaria y económica derivada de la pandemia por COVID-19 ha tenido enormes impactos, sobre todo en las mujeres.
El cierre de las salas cunas, jardines infantiles y colegios, como medida de mitigación frente a la pandemia, ha expuesto las falencias de la organización social del cuidado de la infancia, mostrando que recae en el trabajo no remunerado de millones de mujeres y que, sobre este, se sostiene el bienestar económico y social en su conjunto.
La emergencia sanitaria y económica evidencia la necesidad y ofrece la oportunidad de avanzar en el acceso a una protección social universal garantizada. Un pilar fundamental de esta debiera ser el cuidado, entendiendo que constituye una necesidad básica de las familias a lo largo de las distintas etapas del ciclo de vida de las personas.
Mientras se avanza en corresponsabilidad, para alcanzar una reactivación socioeconómica con igualdad de género, este boletín propone renovadas alternativas de cuidado, con base en la ampliación y fortalecimiento de un Sistema de Cuidados de la Infancia y una Reforma al artículo 203 del Código de Trabajo que garantice el derecho universal a la sala cuna.