ComunidadMujer, ChileMujeres y Mujeres Empresarias resaltan la importancia de avanzar en acciones que abran la puerta a más trabajos formales.
El diagnóstico es claro y compartido: se debe seguir avanzando en la recuperación de la ocupación femenina respecto al escenario prepandemia.
La voz es una desde ComunidadMujer, ChileMujeres y Mujeres Empresarias: es urgente la reforma legal al artículo 203 del Código del Trabajo, que establece el derecho a la sala cuna.
El referido beneficio existe en la actualidad, pero sólo para las trabajadoras de empresas que cuenten con 20 o más mujeres contratadas.
‘El efecto de eso es que las empresas contratan hasta la número 19 o, de alguna manera, ese costo adicional de la sala cuna, por otro lado, lo cargan a sus salarios. Entonces, produce brecha salarial y además es discriminatorio’, dice Alejandra Sepúlveda, presidenta ejecutiva de ComunidadMujer.
La presidenta ejecutiva de la Fundación ChileMujeres, Francisca Jünemann, subraya que la reforma a esa figura aportaría a la formalidad laboral, lo que considera clave para atacar el problema desde una perspectiva de nivel socioeconómico.
Decidor, dice que en el quintil de menores ingresos (primero), la tasa de participación de las mujeres -o sea, aquellas que están en la fuerza de trabajo como porcentaje de la población en edad de trabajar- no llega a 30%, mientras que en el de mayores ingresos sube a 76,6%. La misma brecha se observa en el desempleo, que va de 27% a 9% en los respectivos grupos.
En la misma línea de hacerle frente a la informalidad, propone que se reformen las ayudas sociales para que se fomente el trabajo formal. ‘Muchas veces, aquellas personas que tienen beneficios sociales a través del Registro Social de Hogares, piden incluso que sus condiciones laborales sean informales para no evidenciar este trabajo formal, para no perder puntos en el RSH’, explica.
En su opinión, los beneficios sociales ‘deben fortalecerse, estimular que tengan trabajos formales’.
La corresponsabilidad
La directora de Mujeres Empresarias, Francisca Valdés, sostiene que sacar adelante el proyecto de ley de sala cuna universal va en la línea correcta para que más mujeres se incorporen a la fuerza laboral, ‘ya que en ellas recae principalmente el cuidado de hijos menores de edad’.
Lo anterior, en un contexto en que dice que hay que apuntalar el crecimiento de la economía, atraer inversión y generar nuevas oportunidades, que se traduzcan en fuentes de trabajo formal. Esto, a su vez, cree que debe ir acompañado de políticas de empleo ‘que faciliten la corresponsabilidad entre hombres y mujeres’.
Sepúlveda coincide y estima clave la corresponsabilidad -más que la conciliación-, que se asuma como un derecho de padres y madres trabajadoras, además de que el mundo empresarial aporte con normativas.
Ejemplos de esto son los mecanismos de permisos parentales para que se promueva la adaptabilidad laboral, que no son solo para mujeres; así como otorgar más días de los legales al posnatal masculino.
‘También es importante que las empresas estimulen que los padres se tomen el posnatal, y donde ellos puedan tomar las últimas semanas hacia el final de sus seis meses para cuidar a sus hijos e hijas menores’, afirma.
Fuente: Diario Financiero